miércoles, 24 de octubre de 2012


Cambiando paradigmas promovemos la paz


El nacimiento humanizado es un modelo que sensibiliza a quienes están comprometidos en este momento a garantizar el respeto a las necesidades físicas, mentales, espirituales, culturales y sociales de las madres y sus familias, favoreciendo también el ejercicio de sus derechos. A pesar de considerarse un movimiento de carácter mundial que ha logrado involucrar a respetados líderes de las comunidades científicas, académicas, así como a los organismos internacionales voceros y garantes del desarrollo de las naciones, el mismo ha requerido un esfuerzo importante en el cambio de los paradigmas relacionados con las prácticas médico-asistenciales y de salud durante el embarazo, el parto y el puerperio.

Partiendo del hecho general que un paradigma es un modelo o enfoque del entorno, que por medio de un sistema creencias, define las interpretaciones y acciones de las personas; la Dra. Robbie Davis Floyd, Antropóloga Cultural y Especialista en Antropología Bio-Médica y de la Reproducción afirma que,  tal como un pez no puede ver el agua en que nada, un ser humano muchas veces no puede ver sus creencias; opera y vive como si sus éstas fueran la única realidad. Es por ello que la especialista establece lo que implican las preconcepciones que el paradigma tecnocrático maneja respecto al parto, en contraposición con un modelo humanizado de atención a la mujer.

En este sentido, el modelo tecnocrático metaforiza el cuerpo de la madre como una máquina defectuosa que requiere al experto técnico que rescata al bebé, al hospital como una fábrica donde se obtiene el producto de la madre y a la tecnología como elemento trascendente sobre todo el proceso. Se caracteriza por una pérdida del sentimiento de identidad hacia la persona como individuo, donde la noción de la esfera íntima de la mujer queda sin interacción con el personal asistencial. Teniendo tecnología hemos de usarla y se actúa sin dejar obrar a la naturaleza con intervenciones innecesarias que responden a la incapacidad de asumir y respetar el tiempo que toma la evolución natural del parto.

El nuevo paradigma asistencial humanista en cambio, se sustenta en criterios muy diferentes donde el parto y el nacimiento son considerados acontecimientos fisiológicos y trascendentes desde el punto de vista personal, familiar y social. Se respeta el ritmo del cuerpo femenino, perfectamente preparado para parir y el control de la madre sobre su parto. Proporciona una atención personalizada, basada en la evidencia científica y en función de las necesidades de la madre y el hijo, sus expectativas y decisiones, centrada en favorecer la naturaleza humana. Es precisamente este modelo el que la Fundación de la Familia Tachirense, a través del Programa Madre Feliz, promueve activamente favoreciendo el desarrollo materno infantil con una iniciativa de intervención temprana con enfoque en derechos; incidiendo positivamente en el avance hacia una sociedad inclusiva y de bienestar integral.
Apegados al modelo humanista hemos realizado una serie de encuentros formativos y educativos en el tema con el fin de suministrar las herramientas necesarias a nuestro equipo de trabajo y podamos emprender el camino del cambio de manera cohesionada, comprometida y sensibilizada. Desde el curso de Enfermería Obstétrica, mención Acompañamiento de Parto; el convenio interinstitucional entre la ULA y Corposalud, a través de la Casa de Parto Humanizado, para los residentes del Post-Grado de Gineco-Obstetricia; las permanentes jornadas de capacitación con nuestros asesores especialistas: Dr. Orlando Labrador, Neurofisiólogo y Coordinador de la Escuela de Medicina de la ULA; la Dra. Betzabé Roa, Ginecobstetra y Presidente de la Asociación Venezolana de Pediatría y Puericultura o el Dr. Marco Martínez Psicólogo – Psicoanalista y Jefe de Investigación y Desarrollo de nuestra institución; hasta la videoconferencia internacional con Camila Soto, diseñadora industrial y creadora del HUM -equipo especial para la facilitación del parto y único en el país, que forma parte de la dotación de la Casa de Parto Medarda Piñero. Ésta fue la más reciente experiencia formativa de la que nuestro componente docente y el personal médico asistencial del programa fue participe; siendo el primer encuentro de varios que se están programando para nutrirnos de las evidencias que Chile cuenta en el parto humanizado, tomando como referencia el plan de salud que adelanta ese país y que cuenta con más de cien años de experiencia en la atención personalizada de los servicios de salud materna.
Siempre fieles a las reflexiones del Santo Padre, Juan Pablo II dejaba claro que “la vida humana debe ser respetada y protegida de manera absoluta desde el momento de la concepción”. Hemos asumido un compromiso con la paz y éste comienza desde el vientre materno. Seguiremos adelante.

Genny Morales de Pérez 
Primera Dama del estado Táchira 
Pdte. Fundación de la Familia Tachirense
                                                                                                             pazcomopropuesta@gmail.com 
                                                                      lapazcomopropuesta.blogspot.com
                                                                                      FFTdigital: 


No hay comentarios:

Publicar un comentario