martes, 11 de diciembre de 2012


Un convenio educativo para el Desarrollo Social


El pasado jueves 29 de noviembre la Fundación de la Familia Tachirense y la Fundación Casa Arturo Uslar Pietri, mediante la firma de un convenio, nos comprometimos en aunar esfuerzos para la realización conjunta de planes, programas, proyectos y actividades a los fines de promover  la educación como eje del desarrollo y como instrumento para superar las brechas de desventaja social. Es una apuesta positiva por la cultura  y la enseñanza como herramientas vitales en el proceso de formación de buenos ciudadanos cimentados en valores morales y por la implementación de iniciativas destinadas a garantizar un futuro de paz y progreso.
El Dr. Antonio Ecarri, Presidente Ejecutivo de la Fundación Arturo Uslar Pietri, destacó la importancia de este acuerdo, pues representa el primer convenido que se firma entre dicha institución y un estado del país. Lo define como un plan de trabajo con propuestas activas para convertir al Táchira en la región educadora de Venezuela. “Mientras otros pretenden incluir los temas de política en las aulas de clase, nosotros estamos preocupados por la creatividad, la comprensión lectora, la gramática y la ortografía de nuestros escolares. Estamos las dos Fundaciones esmeradas en implementar una formación amena e interactiva y por ello a partir de este convenio estamos creando el 'Sistema de Niños Escritores del Táchira”.
Los objetivos trazados con este proyecto conjunto de desarrollo educativo son aumentar la calidad de la educación en la red de escuelas municipales y estadales, así como en los planteles privados con los que la Fundación de la Familia Tachirense viene propulsando el programa ¡Qué Nota es mi Escuela!, a través del "Sistema Nacional de Niños y Jóvenes Escritores", estimulando la lectura y la escritura en los niños e incentivándolos a participar del Premio Estadal de Literatura. Todo ello en un marco de formación permanente a los docentes adscritos a la Dirección de Educación por medio de un plan de capacitación pedagógica que estimule su talento propio y permita impulsar la creatividad infantil.
Sentencias como las del Padre Francisco de Roux s.j. nos confirman la orientación que hemos venido gestionando en cada uno de nuestros programas sociales, cuando afirma que la eficiencia del desarrollo no se mide por lo que hacemos, sino por lo que logramos que los demás hagan. Es decir, por las capacidades que dejamos instaladas. En esa medida, la educación y la cultura cumplen un papel fundamental, pues el desarrollo requiere, por una parte, elevar la calidad de la educación y las oportunidades de acceso y, por otra, fomentar una cultura solidaria, que abarque el sentido de pertenencia a un colectivo, el respeto hacia la diferencia y el interés en el bien común.
La Fundación de la Familia Tachirense y el Gobierno Democrático del Táchira tienen a la escuela como prioridad, porque somos promotores de una mejor educación. Quienes nos visitan, como Antonio Ecarri, un luchador que propulsa el bienestar social a través de la cultura  y que tiene como base el legado del gran maestro Arturo Uslar Pietri lo han podido  evidenciar de manera patente. En sus propias palabras: “Hay un respeto hacia la escuela y los educadores por su papel preponderante como formadores de ciudadanos y gestores de cambios sociales. El liderazgo del Gobernador se ha destacado por su trabajo en la educación y en la infraestructura con políticas como la dotación del bulto escolar, insumos didácticos, equipamiento y formación docente; sin olvidar los demás aspectos de una gestión completa. Gracias a eso, en Táchira se respira un ejemplo nacional, de que las cosas sí se pueden hacer bien”.
Nuestra propuesta educativa está fundamentada en los lineamientos de los máximos rectores internacionales en la materia e iniciativas como el acuerdo con la Fundación Arturo Uslar Pietri la respaldan y fortalecen. Al defender nuestra identidad de estado democrático estamos defendiendo las oportunidades de bienestar de la familia y la sociedad por un porvenir de progreso. De esta manera la UNESCO reconoce que la democracia, la paz y el desarrollo se han transformado en componentes cruciales de la evolución de las sociedades. No hay desarrollo sustentable sin paz, no hay paz sin desarrollo, no hay paz ni desarrollo sin democracia y nada de esto podremos alcanzar plenamente sin asegurar el derecho a una educación de calidad para todos. Seguiremos adelante con nuestro compromiso de superar las desigualdades y forjando para las generaciones futuras oportunidades, al darles las herramientas que las capaciten para asumir retos; solo así garantizaremos el éxito de la sociedad que legaremos a nuestros hijos.

lapazcomopropuesta.blogspot.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario